jueves, 11 de septiembre de 2014

Silvia Lagouarde comenta el relato No solo en Navidad de Heinrich Böll en la tertulia 54

No sólo en Navidad es un cuento extraordinariamente simbólico que no deja mucho espacio para el debate imaginario. Sin embargo, salvando la necesidad que tiene este autor de escribir sobre la historia de Alemania, puedo dejar al margen lo simbólico y preguntarme si esto sucede en muchas familias. Y me vino la idea, entonces, de que puede tomarse como un cuento de terror que relata lo siniestro que puede acontecer en una familia cuando lo que prima no es la excepción del goce sino el goce tomado en su totalidad, es decir, que lo absorbe todo dentro de ese entorno familiar. Lo que narra el cuento son sucesos que, en muchas ocasiones, aparecen en esos escenarios familiares. 
Me pregunto qué papel juega en este autor la posición femenina, qué papel juegan las mujeres. El personaje de la tía Mila es central en el relato. Es la que organiza lo siniestro, el horror, la repetición del goce. Parece un personaje femenino encantador, dulce, vital, pero cuando se rompe algo de su goce surge un alarido igual que el de una fiera. Me preguntaba qué simboliza, en este relato tan simbólico, el personaje femenino de la tía Mila con este alarido. 

¿No es una manera de acusar a ciertas subjetividades femeninas que, generalmente, conforman lo siniestro de la familia articulando inocencia y pasión por la ignorancia? Son muchas las madres que no quieren saber nada de lo que gira en torno al amor que tienen por sus hijos, aunque estos sean verdaderos canallas y asesinos –se ve mucho en la mafia. Me preguntaba si es posible responsabilizar a las mujeres. Generalmente no se las responsabiliza. Ante esta articulación entre inocencia y pasión por la ignorancia, ¿de qué manera es responsable esta posición femenina? Lo pregunto porque, como digo, generalmente se les perdona siempre poniendo por medio el tema del amor, la inocencia y pasión por la ignorancia. Es decir, ¿en qué medida son responsables, también, de lo siniestro?

Silvia Lagouarde

No hay comentarios: